sábado, 31 de agosto de 2013

Peregrinación de jóvenes

Esta noche, un grupo diverso, pero en su mayoría jóvenes, fuimos en nocturna peregrinación desde el santuario hasta o "Coto da vella". El tema de reflexión giró en torno al ciego Bartimeo. Un hombre, como tantos, sentado al borde del camino y pidiendo limosna. Nuetsras cegueras y nuestros conformismos de satisfacernos con lo que nos dan de "limosna", cambian al descubrir el que realmente puede cambiar el rumbo de nuestra vida. Es el grito del ciego "Jesus, ten piedad de mí" el que hace posible el encuentro. Un treecho del camino lo hemos hecho con los ojos vendado, así en la oscuridad, y confiando en quien te guía, respondimos a la pregunta de Jesús ¿Qué quieres que haga por tí?. Todo el mundo te dice lo que debes hacer, pero pocos se ofrecen a ayudar. Después de toda la subida, por fin llegamos al destino. Alli recitamos la oración del Papa Francisco en este añod e la fe y, con las linternas apagadas, contemplamos la maravilla de la creación. Es impresionante. El descenso fue sencillo y ágil. Finalizamos la noche, a eso de las tres y pico de la madrugada, con chocolate. Hasta el próximo año.

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